la tarde en la cual invadiste un campo energético distinto al tuyo
entrando a zonas inimaginablemente prohibidas
como cuando con una sola mirada desarmas y desvistes cualquier tipo de integridad
tu voz en mis oídos llevándome a ese extremo que todo ser humano suele esconder
e intenta en algún momento de su vida dejar muy atrás
tu extraña adicción que poco a poco me ha mantenido atada
ese abrazo no fue un abrazo
las pupilas normalmente no se dilatan
y lo que vino después usualmente tampoco se hace
...mucho menos decir: "hmmmm"
aunque.... la verdad
a mí también me gustó
